Anécdotas Hípicas Venezolanas presenta

Luis Alfredo Rincón

Por Juan Macedo

 

Además de ser un exitoso hombre de negocios en el mundo de la construcción, Don Luis Alfredo Rincón Ceballos destacó como criador y propietario en Venezuela, e incluso llevó a pasear sus colores verde y blanco con el trébol del Stud Chamus a nivel internacional, específicamente a los hipódromos de La Florida, Norteamérica. Nació el 16 de enero de 1940, hijo de Don Luis Angel Rincón Troconis y Doña Ana Teresa Ceballos.

 

Se casó con Holly DeVries de Rincón, quién compartió su pasión por los caballos. Fue en el año 1967, gracias a una ganancia fortuita de US$15.000, que decidió incursionar en el mundo del turf. Recomendado por el entrenador Carlos Muñoz Candía, adquirió al argentino Tropic King, que resultó buen ganador en Venezuela incluso figurador clásico (3° en el Clásico Jockey Club de Venezuela) y que en su debut en Norteamérica figuró tercero en el Tropical Park Handicap. Fue vendido a intereses newyorkinos por US$75.000 ¡fue un negocio redondo!. También contó con la argentina Tropic Doll (figuró segunda en la Copa Luis A. Landaeta y en Tropical Park se anotó el Vizcaya Stakes con la monta de Walter Carrión que fue especialmente a conducir a la yegua) y Tropic Prince (rendidor ejemplar argentino, el mismo caballo que escoltó a Fox, en la carrera de los ases que ganó Gustavo Ávila en marzo de 1970).

 

La afición creció y como propietario se vio rodeado de buenos corredores, aunque sin la suerte de un gran campeón. Purasangres como la selectiva Asomada y las buenas ganadoras Ingeles, Goldie Gold y Come On Fred rodearon de éxitos a la famosa chaquetilla verde y blanco.

 

En el circuito de Florida se mantuvo con éxito, su mejor corredor fue sin dudas Ana T (en honor a su madre), una hija de Fire Dancer que desde 1987 hasta 1990 le brindó grandes satisfacciones, incluyendo el Jacaranda Handicap y el Princess Rooney Handicap, ganando 12 carreras y US$345,008 en premios.

 

Su pasión por el hipismo lo llevó a la cría, inicialmente con yeguas pensionadas en diferentes haras de Venezuela, pero la suerte no le acompañó, incluso con la muerte prematura de algunas yeguas madres. Se le presentó una gran oportunidad con los terrenos del Haras Longchamps (en Bejuma, estado Carabobo) para formar en el año 1989 el Haras Luisiana, con su inseparable Holly, dotándolo de las más modernas instalaciones y seleccionando las mejores corrientes sanguíneas. Sus primeros sementales fueron Brothers Three (probado en Chile), Lawmaker (probado en Norteamérica) y Alhajras.

 

De la primera producción del haras salió Crowning Glory, Sashay y Court Lass, buenas corredoras. Luego apareció Texas Trooper (ganador clásico en Santa Rita) y el plantel de yeguas madres iba en aumento con importantes inversiones, mostrando que era otra empresa de éxito de Luis Alfredo Rincón.

 

No habían pasado dos semanas que Don Luis estuvo en el Hipódromo La Rinconada retratándose con Frosty Affair y Centerfold, cuando el 12 de noviembre de 1994 falleció repentinamente en Caracas. Pero dejó un legado dentro del mundo hípico que su esposa Holly ha administrado con gran éxito, el Haras Luisiana.

 

Para cerrar, he aquí un comentario del Dr. Miguel Useche: "Fui su acesor Veterinario, pues el era representante de la firma Sterivet (Productos Veterinarios) para Venezuela. Era un caballero, sencillo, amable, humano, de caracter jovial, en fin un señor como pocos existen en el planeta. Creo que sin temor a equivocarme un enviado de Dios a esta tierra, colmada de caimanes por todos los costados. Uno de esos era su propio entrenador, al cual le perdonaba todas sus mañas, año tras año. Tan fiel era con sus principios que a pesar de todo, nunca le quitó los caballos. En una oportunidad me dijo: Useche, quiero que vayas a la Florida, en especial a Ocala, y revisa todos los padrillos que puedas, estaras acompañado de los morochos (sus hijos), quienes son tan apasionados como yo por los caballos. Tengo un grupo de yeguas haciendo campaña en la Florida y este proximo año las envio a la reproduccion, por eso quiero que veas a estos padrillos, me informas las caracteristicas de cada uno, y veré con quien sirvo mis yeguas. Meadowlake, lo vi por los cuatro costados, se iniciaría ese proximo año en la reproduccion, era un caballo mediano, fuerte, bien plantado, pero con unas cañeras a flor de piel, aun asi se lo recomende. Con el pasar de los años, el tiempo me dio la razón. Estuve con el, incluso en la compra del haras Longchamps fui testigo de los innumerables cambios que le hizo a la finca con la finalidad de poner aquello como una tazita de plata, pues asi era el Doctor, todo en orden y con singular elegancia. No llegue a ser el veterinario de la finca, por lo lejos de ella, con relacion a mi residencia en Caracas, asi se lo di a entender y el acepto de muy buena manera. Fui por muchos años el veterinario de sus caballos en La Rinconada y el no me conocia, ni yo tampoco. Me comentó que siempre le preguntaba a Carlos Muñoz: ¿quien es ese veterinario que aparece en las planillas cobrando el 2% de premios de los propietarios? El cabezón Muñoz nunca le dijo quien era yo, pues de esa manera, y tal y como sucedio con el correr de los años, el Dr. podia enterarse a traves de mi persona todas la marramuncias que el cabezón hacia con sus caballos. Si hay alguna persona durante mi trayectoria en la hipica nacional e internacional que me merezca el mas profundo respeto y consideracion ese es el Dr. Luis Alfredo Rincón. Que Dios lo tenga en la gloria".

 

Fuentes: Revista Gaceta Hípica, Revista Hipódromo, Revista La Fusta, Revista Bloodhorse, Dr. Miguel Useche, www.equibase.com.

 

Anécdotas Hípicas Venezolanas, jueves 27 de octubre de 2011

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