Anécdotas Hípicas Venezolanas presenta

Silvio Miranda

Por Juan Macedo

 

Silvio Cayetano Miranda Acevedo nació el 4 de septiembre de 1941 en la ciudad de Maracaibo, estado Zulia. Curso hasta segundo año de bachillerato en el Seminario y le dio por ser jinete pues detrás de su casa se alojaban varios caballos que corrían en el hipódromo, no pasando mucho tiempo antes de que el sentimiento por las carreras entrara en sus venas. Así conoció el mundo de las carreras de caballos. Dejó la escuela para comenzar su vida en los hipódromos.

 

Inició en la profesión en el año 1959, salió junto con sus compañeros Ciro Arámbulo y Alberto Escalante, bajo la tutela del entrenador Alonso Navas donde dio sus primeros pasos y aprendió a montar. Debutó en el Hipódromo La Limpia con el caballo Poca Cosa, arribando en el cuarto lugar, ese mismo caballo le dio la satisfacción de su primer triunfo bajo la preparación de Ángel Galbán en 1300 metros. Silvio nunca olvidó ese momento. Debido a sus estudios en el seminario le decían “El Padrecito” o “El Curita”.

 

Fue segundo en la estadística del Hipódromo La Limpia en los años 1960 y 1963, ganó más de 100 en el óvalo zuliano. En el año 1961 incursionó en el Hipódromo La Rinconada, su primera monta fue Canrobert y en dos ocasiones estuvo segundo con la yegua Pinda, Sin suerte, enfermó y tuvo que regresar a su natal Maracaibo.

 

En una ocasión perdió con la yegua chilena Wesh Wood con Chístame, se le criticó su actuación y a la próxima semana montó a Chístame derrotando a Welsh Wood para desvirtuar toda duda. Fue propietario del Stud Joropo durante los años 1963 y 64 con el caballo Montenegro. También fue por dos periodos Presidente de la Unión de Jinetes del Zulia (1960-61 y 1963-64) logrando el apoyo de sus colegas de Caracas, existiendo muy buena armonía en el gremio.

 

Regresó al Hipódromo La Rinconada en el año 1964 y logró su primer triunfo el 18 de abril con Brumosa, lo que representó el comienzo de una gran labor profesional. Ese año logró completar 23 triunfos. Rendidor como pocos con los caballos velocistas, Silvio Miranda se mantuvo rindiendo durante el resto de la década de los ’60 y la década de los ‘70. Buenos corredores como Boniato, Colirrojo, Pizarrero, Cassius C y Chagrín pasaron por sus manos exitosamente, pero los triunfos selectivos siempre le fueron esquivos.

 

Fue el 12 de enero de 1975 dentro del marco del Clásico de los Sprinters que el zuliano Silvio Miranda logró su única victoria en prueba selectiva alguna, fue con “el endemoniadoRom-Vit. Se dio la partida y como era su costumbre el caballo corrió disparado en la punta mientras el veloz Altivo perseguía, con la esperanza de que el hijo de Miss Windero se entregara en cualquier momento, sea por cansancio o por su imperiosa tendencia a abrirse en los codos. Sin embargo, nada de eso paso ya que Silvio administró perfectamente al caballo que no se cansó y giró perfecto, casi pegado a la baranda, sin regalar ni un solo metro para finalmente contener efectivamente la atropellada de Tanius e Inteligente y cruzar la meta con sólida ventaja de 1 ¼ cuerpos.

 

De igual manera fue Presidente de la Unión de Jinetes de La Rinconada, demostrando sus habilidades como gremialista y luchador por los derechos de sus colegas profesionales de la fusta. Los años no pasan en vano y mantener el peso físico reglamentario para la profesión se hace cuesta arriba, por lo que Silvio Miranda decidió retirarse de la profesión en el año 1984. Fueron 222 victorias que logró en su vida profesional en el Hipódromo La Rinconada, donde demostró tener un estilo depurado. Luego del retiro, siempre estuvo al pendiente de lo que ocurría en el medio hípico. Falleció el 9 de octubre de 2016.

 

Fuentes: Revista Gaceta Hípica, Revista La Fusta, Revista Turf, Sr. Jaime Casas A.

 

Anécdotas Hípicas Venezolanas, lunes 31 de enero de 2022

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