Anécdotas Hípicas Venezolanas presenta

Miriam Blanco

Por Juan Macedo

El 8 de marzo se celebra en todo el mundo el Día de la Mujer y cuando hablamos de apoyo a las políticas de igualdad entre hombres y mujeres en todos los sectores y ámbitos de la vida diaria, en las carreras de caballos nos encontramos con una de las actividades deportivas donde las mujeres, las “jockettas” como son llamadas popularmente por una derivación del vocablo francés “jockete”, continúan siendo una minoría frente a los jockeys. Un vívido ejemplo de ello lo representa la amazona Miriam Blanco que nació el 12 de mayo de 1972 en San Juan de Colón, estado Táchira.

Aunque se vino a Caracas desde pequeña, a los 14 años, muy joven, fue cuando descubrió que su pasión eran los caballos. Le gustaba ver las carreras por TV y decía “quiero hacer lo que hacen esos hombres allí, montar a caballo” Se fue a Valencia donde conoció a Carlos Pérez, que dirigía en ese entonces la escuela de jinetes del Hipódromo Nacional de Valencia, quien le dijo “tienes el físico para ser jinete, pero aquí nunca ha habido mujeres y en la escuela no te voy a dejar entrar. Tienes que irte a Barquisimeto o Maracaibo para empezar”

Fue en la ciudad de Maracaibo, en el Hipódromo La Limpia, en el año 1986 y conoció a “Totoño” José Antonio Andrade, quien la apoyó y le abrió las puertas para realizar su sueño. Fueron dos años que estuvo en el Hipódromo donde dio sus primeros pasos para optar a ser una dama del látigo, aprendió a montar, aunque no llegó a participar en pruebas públicas.

En el mes de septiembre de 1985 fueron invitadas las jockettas Brenda Zoppo, Doris Duys y June González, que respondieron a las expectativas que habían logrado despertar entre los aficionados. Fue cuando el Presidente del INH en ese entonces, Gilberto Carrasquero, decidió abrir una escuela para jinetes con Antonio José Utrera de director e hicieron un barrido para ubicar posibles candidatas a jinetas.

A pesar que no deseaba irse de Maracaibo, Miriam comprendió que esa era su oportunidad para cumplir con su sueño. En La Rinconada se armó un grupo de candidatas a jinetas: Sonia Mariano, Maritza Trujillo, Yanet López, Obdalis Zapata, Yuri Martínez, Yonira González, entre otras. Arrancaron el entrenamiento y se graduaron. “Muchos me decían La Maracucha, porque al llegar a La Rinconada traía el acento de la zona y muchos se confundieron”

Debutó en 1988 con el caballo Clase y Suerte, entrenado por Guillermo Parra que solía correr por la baranda exterior, pero ese día corrió adentro y fue muy alentador. El primer éxito lo logró el 12 de mayo de 1989 en el Hipódromo Nacional de Valencia con Mabrume, entrenada de Pedro Urbina. En La Rinconada con Chinita Linda en el trofeo 30 años de la Federación de agricultores de Caña de Azúcar, igualmente entrenada de Pedro Urbina. Ese año 1989 fue su mejor año con un total de 12 victorias. Miriam Blanco tenía su cabello largo y luego de cada carrera se quitaba el casco y soltaba el cabello ¡causaba admiración en el público masculino!

Miriam Blanco ganó más de 60 veces mientras ejerció su profesión en los hipódromos nacionales. Su última victoria fue el 10 de abril de 1994 con King’s Band, entrenado de Rubén Sánchez. Tuvo la oportunidad de irse a los Estados Unidos en el año 1995, arregló todo, tenía la visa y donde llegar, con las puertas abiertas y simplemente no se fue. Ella, a raíz de eso, decidió tomarse unas vacaciones y conoció a quien fue su esposo. Fue cuando colgó las botas. Tiene tres hijos, el mayor Rafael Moisés y las gemelas María Lucrecia y Lourdes Teresa. La Amazona no se alejó del hipismo, aprovecho e incursionó en la radio como comentarista radial, laborando en Radio Rumbos junto a Omar Khayyam que le puso el apodo de “Super White”. Además, fue aprendiz de la cuadra de Juan Carlos Ávila durante dos años y luego estuvo unos meses en la cuadra de Germán Rojas.

La muerte de su esposo en abril de 2015 le impidió graduarse de entrenadora de purasangres, ya que tuvo que dedicarse a mantener la familia. Le faltó presentar el último examen.

Miriam Blanco había renovado la matrícula de jinete y con el apoyo de las autoridades está laborando como Pony Girl (o simplemente policía de pista) desde principios de 2016, siendo la primera dama que realiza esta noble labor en el turf nacional. Los riesgos de los jinetes y amazonas son a diario en la pista, ya que la profesión así lo exige y muchos corren con suerte, otros no. Miriam sufrió un accidente el domingo 15 de enero de 2017, luego que su caballo intempestivamente se le fue de manos y dio una vuelta de canela con ella, cayéndola encima a la policía de pista. El informe del servicio médico informó que Miriam sufrió fractura del tobillo derecho y debió guardar reposo.

Amazona, aprendiz de entrenadora, asistente de trainer y Pony Girl, son varias de las labores que ha ejercido la “Super White” que espera que reanude la escuela para ser entrenadora. Miriam Blanco es optimista y siempre tiene una sonrisa a pesar de cualquier vicisitud. “Mis amuletos son Dios y la Virgen, encima de los equinos”.

Fuentes: Lic. César Augusto Rivero, Revista Gaceta Hípica

Anécdotas Hípicas Venezolanas, lunes 31 de mayo de 2021

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