Anécdotas Hípicas Venezolanas presenta 

José Antonio Sayago

Por Juan Macedo

 

Si usted, como apostador, se molesta cuando un jinete pierde un caballo al que usted le ha apostado piense bien que esa persona es un ser humano y que mientras usted arriesga dinero en ese caballo, el jinete está arriesgando algo más: su vida.

 

Con esta introducción quiero recordar a un buen jockey venezolano, probablemente olvidado por la mayoría de los hípicos, se trata de José Antonio Sayago. Nacido en la población Independencia, ubicado en el estado Táchira, el 13 de mayo del año 1932, fue hijo único de la Sra. Ana Dolores Sayago. El joven José fue un excelente jinete, lo demostró desde que comenzó como aprendiz al debutar en el Hipódromo Nacional El Paraíso en el año 1950. Tres meses después conquistó su primera victoria. Desde ese momento José Sayago inició la ruta de éxito sumando triunfos tras triunfos en corto tiempo que le llevó a graduarse de profesional al año siguiente.

 

Era muy apreciado por sus colegas y amigos, siempre se destacó por su carácter alegre y valiente. Por lo regular, su fuerte temperamento lo mantenía inactivo por suspensiones acordadas por el Comisariato, pero siempre se contaba entre los principales látigos criollos gracias a su audacia y capacidad de jinete enérgico, con un estilo natural, respaldado por sus atributos físicos que le ayudaron a conseguir excelente posición sobre los ejemplares sacándoles el máximo. Fue el jinete oficial de El Griego durante su campaña como dosañero, ganando el 24 de noviembre de 1954 el Clásico Antonio José de Sucre.

 

Pero el sábado 2 de febrero de 1957, apenas amaneciendo, sucedió lo inesperado. Era una mañana normal de traqueos y Antonio Algarbe sacó a su caballo Mikado (caballo argentino con campaña de seis actuaciones en su país de origen y que se prestaba a debutar en El Paraíso) para que se ejercitara y José Sayago se encargó del mismo, subiendo a su cabalgadura. En la recta final. el caballo iba pegado a la baranda y faltando unos 100 metros hizo un cambio de manos, con tan mala suerte que tropezó con la baranda, la cual cedió, ocasionando una aparatosa rodada, aproximadamente a las 7 de la mañana.

 

José Sayago sufrió múltiples fracturas y fue llevado inmediatamente al servicio médico que funcionaba en el Hipódromo Nacional, para luego ser trasladado a una clínica particular; donde, a pesar de los esfuerzos de los médicos que lo atendieron, el jinete profesional falleció tres horas después.

 

Ese día el deporte hípico venezolano perdió a un destacado atleta que puso su nombre en el escenario en múltiples ocasiones. El total de sus triunfos sumó 113 victorias. ¡Honores a José Sayago, un guerrero olvidado del hipismo de antaño!

 

Fuentes: Revista Gaceta Hípica, Ing. Juan Macedo (apuntes personales)

 

Anécdotas Hípicas Venezolanas, domingo 31 de diciembre de 2023

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