Anécdotas Hípicas Venezolanas presenta

Humberto Guzmán

Por Humberto Guzmán F.

 

Las claves para ser un buen jinete: tener disciplina, ser honesto y montar mucho, tiene que adaptarse a los distintos caballos y sacarles el mayor rendimiento posible. Eso lo aprendí de mi padre Serapio Humberto Guzmán López, que nació el 14 de noviembre de 1952 en la localidad de Santa Lucía, estado Miranda, hijo de Don Antonio Guzmán y Doña Cruz María López.

 

Desde joven le interesó el hipismo. Luego de culminar los estudios de bachillerato, busco la manera de entrar en el mundo de las carreras de caballos y fue gracias al Sr. Luis Monasterios quien le apoyó para ingresar en la Escuela de Jinetes del Hipódromo La Rinconada, compartiendo sus obligaciones como alumno en la escuela con labores como peón en la cuadra de Pedro Armando Quintana, quien fue un maestro para mi padre. Se graduó en la Promoción Dr. Otto Padrón Guevara el 18 de abril de 1976, junto a otros 17 jóvenes, entre ellos William Mujica, Miguel Blanco, Ángel Angulo, Andrés Bianco, José Dugarte, Ildemaro Suárez, Manuel Núñez y Joao Pereira.

 

 

Debutó ese día con Cielo Gris llegando en la cuarta posición en carrera ganada por Gamuraga con Ángel Angulo. Su primer triunfo fue el jueves 30 de septiembre con Yolanda, pupila de Giovanni Contini. Fue la única victoria que logró ese año. Luis "Cachito" Carvajal fue el único secretario que tuvo mi padre en La Rinconada. Yunta inseparable, lo acompañó desde el inicio de su carrera hasta el final de la misma logrando una junta de más de 25 años de trabajo juntos. El resto de la década de los ’70 fue muy duro, montando muchos purasangres, pero con poca oportunidad, esto mi padre lo vio como un área de oportunidad para seguir aprendiendo y creciendo como profesional de la fusta.

 

 

En el año 1980 mi padre fue demostrando con creces lo que había aprendido y la experiencia adquirida, ganando con más frecuencia. En una ocasión, el 15 de marzo (reunión 26) logró 4 victorias con los purasangres Paripé, Viraje, Kalivia y Ajedrezado. También logró ese año obtener su triunfo número 60 con la yegua Cumbancha el 31 de agosto y de esa forma convertirse en jinete profesional. Fue un gran año, tanto así que le permitió alcanzar el Titulo de Aprendiz del año, compartiéndolo con José Romero Villalobos.

 

 

Humberto Guzmán se volvió el jockey de confianza de los entrenadores Pedro Armando Quintana y Raúl Salazar. Pero su primer triunfo selectivo lo obtuvo con un pupilo de Simón Cornelio, por supuesto fue un batacazo de Bs. 148, “El ViejoBala Fría en la Copa Jaime Todd de 1982. El mejor purasangre que montó fue Peryola, entrenada de Raúl Salazar que mi papá fue su monta oficial durante su campaña de dos años en el año 1983, ganando las Copas Agustín Hernández y Nicolás de las Casas. Otros ejemplares con los que ganó pruebas selectivas fueron Viento Salvaje (Copa Cañonero 1984) y North Wind (Copa Hypocrite 1986).

 

La experiencia y dominio de mi papá sobre el purasangre se ganó la fama de jinete de caballos difíciles. Un ejemplo fue una alazana llamada Epic Profit, que fue entrenada en La Rinconada por Armando López García, cuando fue enviada a Valencia tuvieron que recurrir a sus servicios (las 3 carreras que ganó fue con mi papá). En el mes de junio de 1995, en una ocasión que viajó al óvalo de Cabriales para conducir a Epic Profit (que en esa ocasión llegó séptima), cuando ya iba de salida el entrenador José Dilascio López lo solicitó para sustituir a otro jinete (que no dejaron montar porque había fuertes rumores de que quería parar al caballo) en su pupilo Imperial Gold. Mi padre aceptó y logró un magnífico triunfo.

 

 

Una de esas anécdotas desagradables sucedió un domingo del año 1997 en La Rinconada, en la primera carrera, corrió una yegua llamada Retina, gran favorita, y se la durmieron llegando la yegua en el último lugar. Para acotar algo, ese día llegó decepcionado a la casa porque no pudo cumplir con su trabajo. Eso siempre tuvo mi padre, fue muy correcto y honesto en su carrera como jinete.

 

Fue el 28 de junio del año 1997 cuando logró su último triunfo, fue con el caballo Macau Forest (pupilo de José Armando Contreras). Siguió activo hasta el año 1999 cuando decidió “colgar el fuete”. Acumuló un total de 251 triunfos. Luego de su retiro se dedicó a la familia, aunque a veces se le veía en las gradas de traqueos del hipódromo compartiendo con sus amistades. Falleció el 17 de abril de 2017.

 

Fuentes: Sr. Humberto Guzmán F. (apuntes personales y archivo fotográfico), Sr. Fernando J. Gil, Ing. Juan Macedo, Sr. Jaime Casas A., Revista Jockey Pronósticos (foto).

 

Anécdotas Hípicas Venezolanas, domingo 24 de septiembre de 2023

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