Anécdotas Hípicas Venezolanas presenta

Argimiro Guerrero

Por Argimiro Guerrero Jr.

 

Argimiro Aguiar Guerrero nació en San Fernando de Apure el 30 de agosto de 1952, hombre de a caballo y llanero de pura cepa, guerrero como su apellido, hijo de Doña Otilia Guerrero (Q.E.P.D.) y Argimiro Castillo. Estudió toda la primaria en San Fernando, cuando estaba en cuarto grado su mamá lo metió como interno en una granja en Calabozo (estado Guárico) para que se graduara como Perito Agrario pero no le gustó y completó el sexto grado en el grupo escolar de Biruaca, población cercana a San Fernando.

 

 

Luego Argimiro Guerrero pasó al Liceo Lazo Marti donde estudió y aprobó el segundo año de bachillerato, pero tampoco le gustó el bachillerato y se va a la Ciudad de Valencia a realizar un curso de computación de perforaciones de tarjetas IBM, el cual logró aprobar pero nunca ejerció esa profesión después de graduado, la razón: "a mi lo que me gustan son los caballos”.

 

Su mamá fue maestra en una escuela de hogar campesino y era pequeña criadora de animales en Boca Arauca, allí en vacaciones el iba a montar caballos, enlazar toros y ordeñar vacas, eso era lo que le gustaba y pensaba dedicarse a eso, pero en Valencia pensó otra cosa y era en hacerse profesional de la fusta. Esto lo consiguió gracias a la ayuda de su tío materno José Guerrero quien era funcionario de Ipostel y conocía al jinete Juan Fernando Vidal ya que el era quien le entregaba sus correspondencia y este realizó los tramites para ingresar a la escuela de jinetes, pero solo pudo formar parte de ella como oyente (en lo que fue la promoción Marino Escobar), año y medio mas tarde partió rumbo al Hipódromo de La Limpia en Maracaibo junto a Liébano Andrade, Senobio Velásquez, José Bravo, Miguel Carrillo y Luis Alarcón, para una pasantía de 6 meses que se prolongó por 2 años.

 

Como todo principio su comienzo en el Zulia fue difícil porque nadie le daba una monta, pero después de varios meses el entrenador Nelson González le dio a Mamut y consiguió su primer triunfo derrotando en la raya a Refugio Azul conducido por Jesús Portillo (quien era el líder en ese momento), luego los triunfos no se hicieron esperar y culminó su pasantía con 34 triunfos y al momento de irse nuevamente a Caracas estaba peleando la estadística con su compadre Juan José Delgado, el popular "JJ".

 

 

 

A finales de julio del año 1976 fue su debut en el Hipódromo La Rinconada con Viarregio (pupilo de Julio Ayala Coronil) que fue discreto, pero 3 semanas después, el 21 de agosto, logró su primer triunfo con Maeva y esa misma tarde repitió con Virtuosa. Finalizó su primera temporada como jinete con 26 triunfos incluyendo el Clásico Cría Nacional ganado con Niso siendo este su primer clásico en apenas 3 meses de haber debutado en la capital y como aprendiz.

 

 

El año 1977 fue cuando saltó al estrellato, no sólo se graduó de jinete profesional el 31 de julio de 1977, además ganó el Clásico Alberto Smith con Etna en un feroz remate, la Polla de Potrancas con la veloz pupila de Carlos Walker, Shelby, donde defendió la carrera con todos sus recursos; además de siete copas pero la que recuerda con agrado fue la Otto Rahn que obtuvo con la pequeña Blondy; un total de 56 carreras para culminar quinto en la estadística de jinetes.

 

 

A pesar de mantenerse ganador, no fue sino hasta 1981 cuando volvió a triunfar en los clásicos, esta vez fueron los Clásicos Lanzarina y Victoreado para dosañeros, donde llevó a la victoria a la geniosa Chantarella y al sensacional North Music. Era la época donde Ademar Piñango y Víctor Urbina les proporcionaba las mejores oportunidades. Durante esa década logró destacar en las pruebas selectivas, casi siempre sorprendiendo a los grandes favoritos, como por ejemplo en el Clásico Alberto Smith de 1983 con Tres Jolie y de 1984 con Mirzeelen, el Clásico Victoreado de 1985 con Flight Command, el Clásico Antonio José de Sucre de 1987 con Sellador y el Clásico Lanzarina con Fairy. Ese año 1987 incursionó en las pruebas selectivas del Hipódromo de Valencia y se anexó los Clásicos Socopó e Hipódromo de Valencia con Fresal y Afirmo (implantando récord de pista), respectivamente. Su último triunfo selectivo fue la Copa Tapatapa de 1989 con la tordilla de acero Stillwater y su último triunfo como profesional de la fusta fue con el ejemplar Agua Dulce de la familia Carmona. Se retiró definitivamente de la profesión en el año 1993.

 

 

A Argimiro le agradaba tanto los purasangres rápidos como los atropelladores, a cualquiera se adaptaba con facilidad, pero le emocionaba venir de atrás pasar y pasar caballos para ganarles en la raya. Entre los mejores ejemplares que monto sin duda alguna que son Torrejón, Blondy y Stillwater, pero también montó grandes corredores como Jaclyn, Silenciosa, La Morocha, Epic Value, Dai Bella, Stage Door Ed, Star Moon, Dawn Princess, aparte de los ya mencionados.

 

Entre sus satisfacciones están el haberse graduado de profesional en menos de un año, el haberle quitado el invicto a The Queen con la yegua Tres Jolie en el Clásico Alberto Smith, además del invicto a French Dancer con el potro Flight  Command en Clásico Victoreado y el haber ganado unas 300 carreras en La Rinconada, en las que cuenta 35 selectivas, de las cuales 14 fueron clásicos. ¿Sus decepciones? muy pocas como por ejemplo el no haber llevado a victorias clásicas a Torrejón y a Blondy. Fue uno de los látigos más solventes del turf nacional, de quién disfrutamos grandes performances.

 

Anécdotas Hípicas Venezolanas, jueves 17 de agosto de 2006

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