Anécdotas Hípicas Venezolanas presenta

Una Leona

(Arg, 1964, Canthare en Leónica por Chulmleigh)

Por Juan Macedo

 

Se le rinde un pequeño homenaje a Una Leona, una gran yegua castaña argentina que fue una verdadera emperatriz de las carreras, un equivalente a la Reina Victoria de las carreras en Venezuela. Nacida en el Haras La Tropilla el 9 de octubre del año 1964, en los remates de 1966 fue adquirida por el Stud Los Fletes en Arg$1.000.000. Destacó en su país de origen donde ganó 4 carreras, incluyendo el Clásico Perú, de un total de 9 presentaciones y acumular un total de Arg$2.364.000 en premios, luciendo incluso como una de las mejores yeguas de su generación. En las restantes carreras que realizó acumuló un segundo (en el Clásico Ecuador), dos terceros (uno de ellos en el Clásico Carlos P. Rodríguez) y dos cuartos lugares, o sea que nunca dejó de figurar entre las posiciones del marcador. Fue adquirida por los Sres. Gustavo Rotundo Talavera y Fernando Mendoza Aristeguieta, para correr los colores azules con círculo blanco del Stud Rot-Men C. A.,

 

Inició su campaña en Venezuela en el primer trimestre del año 1968 bajo el entrenamiento de Enio Hernández, pero fracasó de manera inexplicable en sus tres primeras salidas figurando fuera de la pizarra, suponiéndose que aún no había logrado su aclimatación al medio.

 

A partir de su cuarta presentación en la arena del Hipódromo La Rinconada, comenzó a dar destellos de su calidad. Su primera incursión selectiva fue en los 1400 metros de la Copa Eduardo Montaubán donde figuró segunda a 1 ¾ cuerpos de la chilena Good Time, para después comenzar una racha ganadora donde destacó su primer triunfo selectivo, la Copa Mathieu Valery, donde triunfó cómodamente con Milton Barra y agenció 111”3 para los nueve furlones.

 

Una Leona confirmó sus títulos como la mejor yegua importada al ganar galopando el Clásico Día del Ejército, resolvió el pleito desde temprano, corriendo cerca y cuando se dispuso a pasar al comando, lo que ocurrió aproximadamente en el poste de los 700 metros, lo consiguió con entera facilidad, distanciándose del lote y culminar la carrera con seis cuerpos de ventaja sobre Little Doll, agenciando 99”3 para la milla

 

En el Clásico Día de la Marina de Guerra y Mercante la hija de Canthare accionó entre las posiciones quinta y sexta, inició un buen avance a la altura de los 500 metros y en la entrada de la recta final ya se había posesionado del comando y los tramos decisivos los cubrió en plan victorioso, con margen de 4 cuerpos sobre Good Time para terminar la distancia de 1800 metros con tiempo de 111“3.

 

Después de mostrar una superioridad evidente contra las de su sexo, enfrentó a los machos de la 4º y 5º Series, batiendo al uruguayo Carpintero, reciente ganador del Fuerzas Armadas, en tiempo de 105"2 para los 1700 metros, así ratificando los buenos antecedentes que trajo desde el sur.

 

Con esos títulos Una Leona volvió a enfrentar a los machos en el Clásico Internacional Organización Sudamericana de Fomento del Purasangre de Carreras. Con su habitual velocidad intentó el comando desde la partida, pero ante la disposición del velocista tordillo Sentenciado, lo dejó encargado de la punta para no intervenir en una lucha estéril por el primer lugar, decisión en la cual su jinete Milton Barra tuvo su primer acierto. Sentenciado siguió en el comando hasta terrenos de los 400 metris, donde Milton Barra apuró a Una Leona, y rebasó a Sentenciado desde los 300 metros finales y desde entonces la hija de Canthare estableció una superioridad absoluta para concluir ganando por margen de 2 ¾ cuerpos, en tiempo de 113”1 a lo largo de los 1800 metros. Este Clásico permitió a Una Leona su consagración definitiva como auténtica campeona en el Hipódromo La Rinconada, revalidando lo que había logrado en su campaña de pista en Argentina donde se reveló como una de las mejores de su generación.

 

 

A finales de octubre Una Leona participó en el Gran Premio Clásico Simón Bolívar y cayó derrotada en buena lid ante el irreverente Vivo, que se salió con la suya y el primer lauro para un jockey aprendiz en esta carrera, el protagonista fue Adone Bellardi. Continuó campaña sin lograr saborear otro triunfo en dos carreras más durante ese año 1968, hasta el 8 de diciembre, fecha donde hizo su última actuación antes de viajar a Norteamérica.

 

Curiosamente, a inicios de 1969 iba a participar en el Clásico Alberto Smith, pero un inexplicable olvido de su preparador le hizo llegar tarde a las inscripciones y se quedó con todas las tarjetas en la mano. Viajó a Norteamérica y corrió para Gustavo Rotundo, aunque iba a ser objeto de una negociación por US$70.000 realizada por Arnold Winick, pero finalmente no se concretó; participó en el Black Helen S. con la monta de Juan Eduardo Cruz sin éxito. Corrió un total de 16 veces apenas figurando una vez en el marcador para acumular ganancias por US$200.

 

En junio de 1970, procedente de Nueva York donde estaba realizando campaña pistera, Una Leona llegó al Hipódromo La Rinconada. Dos meses después, con seis años a cuestas, reapareció nuevamente con el entrenamiento de Enio Hernández y la monta de Rafael David Guzmán, pero fracasó llegando sexta y última del argentino Paraje. De esa manera injusta culminó su campaña en Venezuela, donde completó un total de 20 actuaciones para 8 triunfos, 4 segundos y 1 terceros, totalizando en premios la cantidad de Bs. 408.631.

 

Una Leona ingresó a la cría en 1971 al Haras San Francisco y después fue enviada al Haras Los Aguacates. Cumpliendo su rol de yegua madre, procreó a los ganadores Motivo, Leónico, Un León, Leoncito y Nenona. Según el Stud Book de Venezuela fue retirada de la cría en 1980.

 

Fuentes: www.anecdotashipicas.com, Ing. Juan Macedo (apuntes personales), Revista Gaceta Hípica, Sr. Gustavo Sansón, Guia Azul, Sr. Antonio Aragonés, Stud Book de Venezuela, Sr. Gastón Savino, Sr. Antonio Nicolás Tassitch, Sr. Otto León C.

 

Anécdotas Hípicas Venezolanas, jueves 10 de mayo de 2007

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